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Descubre los mejores vallados para el jardín

Publicado en Habitaciones - Terrazas y jardines por Cova Pendones

Empieza marzo y la primavera está a la vuelta de la esquina. Si tienes jardín, es el momento de ponerlo a punto. Y no solo las plantas. Hay otros elementos típicos del jardín que, tras el frío invierno, requieren tu atención. Uno de ellos, de gran importancia en el exterior, son los vallados de jardín, que no solo te proveen de seguridad sino, también, de privacidad.

Las cercas y mallas son, además, elementos de decoración que sirven para delimitar zonas exteriores, como huertos, perreras, zonas de piscina, etc. Hay de muchos tipos y materiales: vallas de madera, celosías, brezos, setos artificiales y vallas metálicas.

Nos vamos a detener, precisamente, en la vallas metálicas, pues son las gran desconocidas en cercas para el jardín. Si bien es cierto que no tienen la estética de un brezo o un valla de madera, tienen otras cualidades que las hacen aptas para delimitar ciertas zonas del jardín. En esta tienda online puedes conseguir una gran variedad de mallas y cercas, y además, consejos útiles para saber cuál elegir según tus necesidades y cómo instalarlas.

Ventajas de las mallas metálicas

Las ventajas son múltiples: resistencia, durabilidad, fácil instalación y gran variedad de modelos. Una cerca metálica puede llegar a tener una vida útil de más de 10 años, dependiendo del cuidado y de las condiciones del entorno. A largo plazo, son una buena inversión, ya que requieren poco mantenimiento, frente a las cercas de madera, por ejemplo. Además, su sujeción es sumamente firme y son muy resistentes a la intemperie.

Hay muchos tipos de vallados metálicos: malla simple torsión, malla triple torsión o malla gallineravalla hérculesmalla electrosoldada y barandas de rejas de hierro. Cada tipo de valla cuenta con sus propios elementos de montaje: postes, bases, tensores, bridas, pasadores, alambres, abrazaderas, grapas, tapones, cancelas y mallas de ocultación o de decoración. 

Malla Hércules

Se trata de paneles compuestos por una malla electrosoldada de alambre duro galvanizado. Se distingue por sus pliegues en forma de V que le añaden resistencia y atractivo estético al vallado, y se fabrica en varios colores y acabados. Son óptimas para delimitar y proteger zonas de jardín, piscinas, o áreas deportivas. Se trata de un vallado con una excelente relación calidad/precio. Se puede completar con brezo decorativo para ocultar por completo el interior del jardín.

Malla de simple torsión

La malla de simple torsión es una de las más utilizada en cerramientos de exterior.  Básicamente se puede utilizar en todo tipo de área: parques, centros deportivos, vallados de carretera, agrícolas, etc. Esto se debe a que es la solución más económica y práctica, y sirve para todo. Se vende en rollos de diferentes medidas, dependiendo del tamaño del rombo (también llamado “luz de malla”), el diámetro del espesor del alambre, el ancho y la altura. 

Se fabrica en acero galvanizado o plastificado de color, como verde, negro, blanco, etc. Otra de sus ventajas es que la instalación es relativamente sencilla, pues va sujeta a postes cada 2,5 m, aproximadamente y puede llevar postes de refuerzo, según el terreno. Además, se puede cortar, coser o entrelazar varios rollos si el perímetro lo requiere.

Malla de triple torsión

También conocida como “malla de gallinero”, se trata de una malla en forma hexagonal, tejida con dos alambres que se unen entre sí de tal manera que crea tres torsiones enlazadas. Al no tener nudos de fijación, es especialmente apta para entornos donde haya personas o animales, como gallineros y jaulas de aves. Gracias a su entrelazado, evita que otras aves y animales salvajes penetren en el interior. Además, se utiliza para proteger zonas de jardín y delimitar parterres. También las vemos con frecuencia como sistema de protección en taludes rocosos, para la protección de las carreteras contra caídas de piedras, desprendimientos, deslizamientos de suelo, etc.

Al igual que la malla de simple torsión es fácil de instalar, pero no se deshace si uno de los alambres se llega a romper. Es resistente, flexible, segura y viene en varias dimensiones para adaptarse todo tipo de necesidades.

Malla electrosoldada

Se trata de una malla fabricada con alambres de acero que se cruzan perpendicularmente y se unen con soldaduras eléctricas. Sus alambres horizontales ondulados proporcionan una mayor tensión. Al ir soldada en los puntos de contacto, los alambres de toda malla quedan firmemente unidos, lo que aporte mayor seguridad y resistencia frente a golpes e impactos, cambios climáticos y desgaste. 

Se utiliza frecuentemente para cerramientos y vallas de uso industrial, agrícola y residencial. Además de resistente, es una malla ligera y fácil de manipular, que permite doblarla en la forma deseada. Por eso sus usos abarcan desde vallado de huertos y jardines, la creación de pequeñas jaulas para animales e, incluso, la construcción de hormigón armado, muros de contención y estructuras hidráulicas.

Vallas de hierro

Las tradicionales barandas son elementos de protección y seguridad que delimitan acceso a zonas restringidas y ayudan a evitar caídas o tropiezos. Son elementos de seguridad en balcones, terrazas, puentes o escaleras, y se utilizan frecuentemente en áreas comunes de edificios, comercios, escuelas o parques públicos. Se pueden fabricar en hierro, madera o piedra, pero las de hierro o aluminio son más económicas y duraderas frente a las de madera, y más fáciles de instalar que las de piedra.

Su diseño se puede personalizar hasta el infinito, ya que no existe ningún tipo de restricción. Sólo su altura y ancho entre barrotes debe cumplir con unas especificaciones técnicas determinadas en zonas públicas y residenciales.  Su altura mínima debe ser de 90 cm, aunque esto depende de la distancia vertical desde la cota del suelo. 

En definitiva, no temas instalar vallas metálicas en tu jardín. Son una solución económica, resistente y duradera que permite múltiples formas de ornamentación.