Ideas para ordenar la cocina (basado en hechos reales)

Expediente X. ¿Has notado fenómenos extraños en tu cocina? ¿Cubiertos o táperes que desaparecen? ¿Tapas de olla que cambian de lugar cuando tu no miras? Este fue el reto que propuso Ikea a Decoratrix y que nosotros, por supuesto, aceptamos: ordenar nuestra cocina con los organizadores que venían en una lista. El resultado fue éste, absolutamente real, en la cocina de Organizatrix, quien se tuvo que emplear a fondo: limpió, ordenó y reorganizó todos los rincones de su cocina.

Fruta y verdura bien almacenadas

Casualmente, el mismo día que Organizatrix decidió ponerse manos a la obra, su prima de Burgos le envió esta caja de frutas y verduras de la zona: hermosas berenjenas, rechonchas alcachofas, lechugas recién cortadas... En fin, una maravilla vegetal, que había que cuidar y mantener fresca.

La previsora Organizatrix había elegido el carrito Raskog, aunque no sabía muy bien dónde ponerlo (en el baño, en la zona de trabajo, en el cuarto de los niños... ¡sirve para todo!). Pero la caja de verduras tenía prioridad, así que montó el carrito y organizó las verduras y frutas, separadas en las cajas Variera, ya que no todas las frutas o verduras pueden estar en contacto.

¿Sabíais que no conviene colocar ninguna fruta cerca de las manzanas porque sus propiedades oxidantes las termina pudriendo? Son cosas que aprendimos durante este reto.

Siempre a mano

Una de las razones por las cuales se nos estropea la comida fresca es porque no la vemos, no la tenemos a mano ni a la vista. También los pediatras aconsejan que tengamos las frutas al alcance de los niños para tentarlos cuando tengan hambre. Pero tenerlas a la vista requiere también cierto orden, así que Organizatrix utilizó, una vez más, las cajas Variera para colocar las frutas y hortalizas que más se consumen en su casa.

Además, colocó cuencos de loza en un portaplatos para que los niños se acostumbren a comer la fruta en plato y evitar así el festival de cáscaras de mandarina, huesos de cereza o mondas de manzana por doquier.

Despejar la encimera

Organizatrix es de las que siempre se quejan porque no tienen sitio en la encimera, pero no quiere renunciar a tener todo a mano: condimentos, cucharones, aceites, agarraderas... ¿La solución? Aprovechar el espacio de pared que hay entre los armarios altos y la encimera para colocar una barra con diferentes bandejas y un cubilete, todo de la serie Gruntal. De esta manera, sólo se queda sobre la encimera lo indispensable, como el salvamanteles de varillas Lamplig. Ahora cocinar resulta más cómodo, holgado y mejor organizado.

Almacenamiento de comida

Un punto negro en el orden de cocina es el almacenamiento de granos, cereales, pastas, etc., que solemos colocar en tarros, o dejar en sus bolsas cerradas con pinzas. Organizatrix hizo el ejercicio de sacar absolutamente todo y analizar cómo lo podía organizar mejor: casi una treintena de alimentos, tarros de todos los tipos y formas, bolsas y paquetes a medias... En definitiva, un caos.

Aprovechó los tarros de cristal que tenían cierre hermético y los combinó con los botes de plástico estrechos y en dos tamaños, que se acomodan mejor y ocupan poco espacio. También utilizó los "tuppers" de cristal con tapa Fortrolig, que sirven para guardar cualquier alimento. "¡Calidad de vida!", exclamó Organizatrix.

Todo a la vista

Precisamente fueron los tarros de cristal Fortrolig los aliados perfectos para organizar la siguiente zona: los armarios altos, donde se guarda el pan, galletas y cereales para el desayuno. Organizatrix descubrió que había dos cajas de cereales a medias, unas galletas escondidas al final, el azúcar en tres tarros diferentes, las bolsas de té sueltas por el armario...

Se deshizo de esos paquetes incómodos y abultados, y traspasó todo lo que pudo a los tarros de cristal, redondos, cuadrados y rectangulares, que ocupan menos espacio y almacenan mucha más cantidad y mejor. Pero sobre todo, se puede ver lo que tienen en su interior.

En la balda superior, se encontraban algunas medicinas, así que decidió guardarlas en un cajón de madera Variera, y apartarlas de la vista y alcance de los niños.

Los cajones

Finalmente, llegó el momento más temido: los cajones. ¿Por qué los cajones son tan susceptibles al desorden? En éste, Organizatrix guarda todo tipo de cosas: bolsas, agarraderas, pinzas, papel de aluminio y film de cocina..., hasta un mazo y una churrera.

Es difícil coordinar elementos tan dispares, pero al menos se pueden separar y diferenciar: así, se le ocurrió utilizar la bandeja de madera Variera, que generalmente se utiliza para los cubiertos, para colocar en ella los elementos más alargados, como los papeles de cocina (vegetal, aluminio y film), las bolsas y otras piezas largas.

Después del reto, os podemos asegurar que lo más importante es utilizar organizadores adecuados que separen el caos, o al menos, que lo limiten.

Nota: Todas las fotos están basadas en hechos reales y no han sido manipuladas, ni el antes ni el después. Organizatrix no nos lo hubiera permitido.