Cómo colgar lienzos en la pared
Es cierto que muchas veces renunciamos a decorar las paredes de nuestra casa con una composición de lienzos o fotografías por no estropearla con agujeros, especialmente cuando se trata de pisos de alquiler. Y es una pena, porque sea cual sea el ambiente elegido para colgar nuestras obras, la decoración gana, no solo riqueza visual, sino también personalidad. Por eso, para animarte a que presumas de paredes, hemos preparado una pequeña guía con consejos para colgar lienzos en la pared sin dañarla.
Pero ¿por qué hay que taladrar?
Existen diferentes sistemas para colgar lienzos en la pared sin necesidad de hacer agujeros; fijaciones que, dependiendo del peso de la obra, ni siquiera requieren tacos ni alcayatas, como almohadillas y ganchos adhesivos.
Las almohadillas o tiras adhesivas son muy fáciles de utilizar, ya que funcionan igual que el velcro. Primero hay que limpiar bien la superficie, retirar el papel protector, pegar una tira en el marco del cuadro y la otra, en la pared. Después, unir el cuadro a la pared haciendo coincidir las tiras. Las encontrarás en establecimientos especializados y, si estás pensando en decorar la pared con tus propias fotos, existen tiendas como Photobox.es que te las suministrarán con los cuadros que encargues. Foto: Spacejoy en Unsplash.
Los ganchos adhesivos son otro tipo de colgadores que tampoco requieren el uso de un taladro. Son muy sencillos de poner: solo tendrás que limpiar previamente la pared con un poco de alcohol y, una vez seca, pegar el gancho. Son perfectos para lienzos ligeros y se suelen usar mucho en cocinas y baños para colgar trapos o toallas pequeñas. En la actualidad hay ganchos con un adhesivo específico para baños y cocinas donde puede haber humedad debido al vapor que se puede generar en estas estancias. Foto: Spacejoy en Unsplash.
Más soluciones
La tercera opción para colgar lienzos en la pared sin usar taladro son los clavos adhesivos, que soportan entre 0,5 y 4 kilos. Si los cuadros que vas a colgar pesan más, entonces te conviene optar por fijacuadros, que pueden soportar hasta 8 kilos. Son unos ganchitos metálicos, con dos o tres puntitas afiladas que se sujetan a la pared con un golpecito de martillo. Están recomendados para paredes de pladur.
¿Conoces los adhesivos de montaje? ¿Y el “no más clavos” de Pattex”? Esta pasta, parecida a la silicona, es muy fácil de usar. Basta con poner una gotita en cada esquina del cuadro, colócalo en la pared y retíralo. De esta forma, quedará la marca del adhesivo en la pared. Pasados unos segundos, la pasta se habrá secado un poco, se convierte en una especia de pegatina. Entonces, vuelve a colocar el cuadro haciendo coincidir las marcas de pegamento y presiona un poco. ¡Pueden aguantar hasta 20 kilos! Cuando quieras retirar el cuadro, solo necesitarás una espátula.
Todo son ventajas
Estos productos, además de ofrecernos la posibilidad de renovar cada dos por tres la decoración de las paredes sin dejar huella, tienen otras ventajas frente al uso del taladro.
En primer lugar, a parte de la necesidad de contar con un taladro y de saber usarlo –obvio– la instalación de cualquiera de estos sistemas –si podemos llamar instalación a pegar unas tiras en la pared– es mucho más limpia, pues no levanta nada de polvo. Además, podrás sacar a la decoradora que llevas dentro siempre que quieras, sin importarte si son las ocho de la mañana o la hora de la siesta, pues, a diferencia del ensordecedor y molesto ruido que provoca el taladro, usar estos productos es un trabajo silencioso.
Otras formas de colocar tus lienzos
En más de una ocasión te hemos comentado la opción de crear tu pequeña galería sobre baldas. Una idea que también te permitirá cambiar los cuadros cuando quieras y que, además, te evitará la difícil tarea de componer, medir y clavar. Eso sí: para colgar los estantes sí tendrás que utilizar un taladro, a menos que recurras a baldas que ya tengas en casa como las de una estantería o las repisas de un cabecero de obra y de la chimenea. Foto: Sincerely Media on Unsplash.
¿Y qué me dices de cómodas y mesillas? Muchas veces no sabemos cómo decorar su superficie y una composición de dos o tres cuadritos puede ser una buena idea. Foto: Stephanie Harvey en Unsplush.
Las guías para colgar cuadros por medio de cordones de aluminio o hilos de nailon son otra solución para que las paredes sufran menos. Sólo es preciso hacer dos o tres orificios en la parte superior de la pared, dependiendo de la longitud de la guía y del peso que vaya a sostener. De esta forma, la pared no se maltrata con agujeros y puedes cambiar los cuadros a tu antojo, sin necesidad de retocar y pintar nuevamente.
¡Inspírate!
Ahora colgar un cuadro sin estropear la pared es más fácil, ¿verdad? Solo tienes que elegir el sistema más apropiado para colgar los tuyos. Y si necesitas inspiración para decorar las paredes, en Decoratrix te damos las claves para colgar cuadros y fotos de forma decorativa.
