Comedor y cocina de un piso moderno
Hace unas semanas os mostramos el salón de este piso madrileño (pincha aquí para verlo), con la promesa de que os enseñaríamos otras estancias del mismo. Hoy nos detenemos en el comedor, que mantiene la misma línea de elegante simplicidad, a base de gris perla y madera, los dos elementos básicos de su decoración.
El espacio está presidido por una mesa cuadrada de hierro patinado, de Jesús Cadarso, alrededor de la cual se colocaron las silla CH24, de Carl Hansen (de venta en Villa Victoria). Encima, una magnífica lámpara cuadrada de tela, hecha a medida en la tienda de lámpara Rocosa, y en el suelo, una alfombra de KP, completan la decoración.
Como mueble auxiliar, en un costado del comedor se colocó un aparador bajo de estilo nórdico. En esta imagen se puede apreciar el foseado del techo, con un zócalo perimetral tras el cual se esconden las luminarias. Este elemento le da profundidad a la estancia y le aporta mayor amplitud visual. Las paredes van pintadas de un color gris perla mate, acorde con el suelo de losetas de piedra Bateig azul grisáceo.
El comedor da paso a la cocina, a través de una puerta corredera de cristal traslúcido, cuyas hojas se deslizan por medio de un sistema de riel superior, que prescinde de canaleta en el suelo.
En la pared de la derecha, un conjunto de espejos en vertical con marco de madera en negro da profundidad a la habitación. El mueble chino es de anticuario, y se adquirió en Becara.
La cocina, de reducidas dimensiones pero muy bien aprovechada, se distribuyó en forma de U con la zona de cocción ocupando una pared. El frente de la pared se protegió de una forma muy original, con un espejo de cristal ahumado para dar sensación de mayor amplitud.
Para no agobiar el espacio, se dejó libre de armarios la parte superior de las paredes. Los muebles son de melamina en acabado haya, con vetas vistas; y la encimera, en color gris antracita, es de Silestone. Todos los electrodomésticos son de la firma Bosch. Fotos: Decoratrix.
